Estos días recordamos la película Casablanca para los alumnos de la optativa Imagen y Sonido, a su vez interesados en la Historia Contemporánea, con motivo del 70 aniversario de su primer estreno el 26 de noviembre de 1942 en Nueva York. También por ser considerada como una de las mejores películas de todos los tiempos. Afamada no sólo por su calidad cinematográfica, sino también por haberse convertido en un auténtico icono, en un conjunto de múltiples simbologías para los espectadores de diferentes épocas. Si tuvo ya éxito cuando se estrenó oficialmente en enero de 1943 en Los Ángeles, su fama creció cada vez más con el paso de los años según lo que entendía cada generación de ella, reforzando su apreciación.
Ganó tres premios oscars: a la mejor película, mejor guión y mejor montaje. Fue producto de un tiempo dramático, el de la Segunda Guerra Mundial, cuando el cine de Hollywood cooperó en la lucha contra el Fascismo. Casablanca une el transforndo histórico de esta guerra ambientada en esa ciudad marroquí bajo el dominio del régimen de Vichy con la historia de amor entre los protagonistas, Rick, interpretado por Humphrey Bogart e Ilsa, por Ingrid Bergman, que es perseguida junto a su marido, Victor Laszlo, lider de la resistencia, por los nazis. Rick fue un colaborador de las Brigadas Internacionales en la Guerra Civil española que tuvo una relación amorosa con Ilsa en París, pero fue abandonado por ella cuando iban a marcharse juntos.
El reencuentro dará pie a esta inolvidable película que ha permanecido como un símbolo de la libertad y el compromiso ético del ser humano frente al autoritarismo, y lo que supone de renuncia a la felicidad individual. Complementado por un extraordinario guión, que fue escrito según iba realizándose la película, inspirado en la obra de teatro Everybody comes to Rick´s, con frases célebres y contundentes cargadas de cinismo y afecto, como Siempre nos quedará París, que quedan grabadas en la memoria del espectador. Aluden a un tiempo pasado, que adquiere la categoría de mítico, reforzadas por la famosa canción, As time goes by, que une a los dos protagonistas. Por tanto, al recordar Casablanca, nos interesamos por una obra cinematográfica muy valorada por sus cualidades intrínsecas, visuales, sonoras y argumentales, asociadas a un periodo muy significativo de la historia mundial, y que igualmente, forma parte de esa historia hasta la actualidad.